Una victoria contundente

"El caballo se alista para el día de la batalla, mas Jehová es el que da la victoria." Proverbios 21:31 RVR 1960

Investigando en Internet a acerca de los caballos de batalla encontré lo siguiente:

"El ser humano ha empleado durante milenios a los caballos para la guerra, probablemente desde su domesticación. El caballo ha sido entrenado especialmente para varios usos militares, incluyendo batallas, combates individuales, reconocimiento, transporte y abastecimiento. 

Los detalles acerca de los distintos métodos de entrenamiento de caballos, en particular de los caballos de batalla, varían en función de las distintas culturas y periodos históricos en que se produjeron. 

Si un caballo es entrenado para arrastrar carros o para entrar en batalla en forma de caballería ligera, caballería pesada o como un destrier, usado tradicionalmente para transportar a los caballeros fuertemente armados, se requiere mucha capacitación para superar el instinto natural del caballo de huir del ruido, del olor de la sangre y de la confusión del combate. El caballo tiene que aprender a hacer frente a las armas del enemigo, a no retroceder por el pánico aunque sea golpeado o herido, a no encabritarse a causa de los movimientos repentinos del enemigo y a mantenerse equilibrado cuando su jinete realice algún movimiento de agresión. Desarrollar el equilibrio y la agilidad es fundamental." Tomado de Wikipedia

"El caballo se alista para el día de la batalla, mas Jehová es el que da la victoria."

Como vemos los caballos eran un elemento importante en una batalla y como tal debían alistarse. Sin embargo lo que nos enseña éste proverbio de la palabra de Dios es que así como un caballo se alista para una batalla, se alimenta de una manera especial, se entrena, se capacita, etc. así nosotros debemos hacer los que nos corresponde ante las situaciones adversas de nuestro diario vivir en nuestro trabajo, nuestras relaciones familiares y personales, pero sabiendo que es Dios quien da la victoria; por ejemplo si estamos buscando empleo a nosotros nos corresponde diseñar la hoja de vida, asistir a las entrevistas y todas las actividades que se requieren dentro de un proceso de selección; no obstante quien abre la puerta para ese empleo es el Señor. También si nos encontramos en una situación adversa en nuestro trabajo o en nuestros estudios, nos corresponde capacitarnos, estudiar, investigar para enfrentar tal situación; no obstante no debemos olvidar de quien es el da la victoria. Si nosotros hemos encomendado nuestros pasos y nuestra vida a El, estemos confiados que Dios nos dará la victoria.

En la biblia encontramos la historia de David, cuando aun no era muy conocido se enfrentó en batalla a un gigante llamado Goliat, en una de las batallas mas famosas, lo que no sabia Goliat era que David iba con el Señor Jesús, quien es el que da la victoria; David le dijo: "¡Y tú vienes a pelear conmigo con espada, flecha y lanza! pues yo vengo en el nombre del Dios todopoderoso, el Dios de los ejércitos de Israel, a quien te has atrevido a desafiar. Jehová te entregará hoy en mi mano, y yo te venceré...".

"Confía en Dios y el hará..."

El Señor libró a David no solo en esta batalla sino en muchas mas, por eso en sus postreros días escribió un salmo en homenaje a quien le dio la victoria: "Te amo, oh Jehová, fortaleza mía. Jehová roca mía y castillo mio, y mi libertador; Dios mio, fortaleza mía, en él confiaré; Mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio. Invocaré a Jehová quien es digno de ser alabado, y seré salvo de mis enemigos." (Sal. 18: 1-3).

Querido amigo lector te invito a que si estas pasando por un momento adverso de aflicción, te alistes, hagas las diligencias que corresponden, toques puertas, preguntes, averigües, investiga etc. Pero esté tranquilo y confiado que Dios te dará la victoria y no una victoria cualquiera sino una victoria contundente.

Te invito a que no te inquietes, no te preocupes, pon tu confianza en Dios.

¡Pero no hay razón para que me inquiete! 

¡No hay razón para que me preocupe!

¡Pondré mi confianza en Dios mi salvador!

¡Solo a él alabaré!

Sal 42:5

¡El Señor te bendiga!